Motril es la población más meridional de la provincia de Granada y la ciudad más importante de la Costa Granadina. Situada a orillas del Mar Mediterráneo, cuenta con kilómetros de playas, puerto deportivo y el mejor ambiente veraniego de la provincia.

Lo más característico de Motril es su clima, por algo se conoce a esta zona como La Costa Tropical de Granada. La Sierra de Lujar, que los protege de los fríos vientos de Sierra Nevada, y la calidez del Mar de Alborán, hacen que los motrileños disfruten de un clima subtropical que les garantiza 320 días de sol al año, veranos cálidos e inviernos templados.

Fuente de entrada a la ciudad de Motril

Fuente de entrada a la ciudad de Motril

 

A este clima responde la introducción de la caña de azúcar por los musulmanes del Reino de Granada, allá por el siglo X, y que llevó a esta pequeña ciudad industrial-pesquera a producir uno de los mejores rones del mundo. Asimismo, mucha de las frutas tropicales que llegan a nuestras mesas (aguacates, mangos chirimoyas,…) proceden de la huerta motrileña. Es fácil ver los cultivos en los campos que rodean la ciudad.

Pero, además de playas de aguas tranquilas, restaurantes de “pescaito”, plátanos y ron, Motril ofrece una agitada agenda cultural y social en verano; con eventos al aire libre, visitas nocturnas a monumentos, conciertos, teatros, excursiones, gastronomía y mucha historia.

 

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Santuario de la Virgen de la Cabeza

La ciudad existió ya como enclave fenicio, en ella estuvieron los romanos y los árabes le pusieron el nombre. Fue el refugio de la reina Aixa al-Horra durante los últimos años del Reino nazarí de Granada y enclave francés durante la guerra de la Independencia. Ya en el siglo XIX Motril fue partícipe de un acontecimiento singular, se proclamó Cantón Independiente, declarando la Guerra a Madrid y fundando la efímera República e Motril, desde el 22 al 25 de julio de 1873.

Todos estos acontecimientos han dejado su huella en la arquitectura y monumentos de esta curiosa e idiosincrática ciudad que en verano brilla con luz propia.

Desde Hotel Mirasol de Órgiva, en La Alpujarra, se tardan tan solo 38 minutos en coche en llegar hasta la costa. La ruta discurre por la  A-4133 y A-346, recorriendo parte del camino que hizo Boabdil en su huida de Granada.